El ascenso catapultante del filial del Valencia.

El filial del Valencia C.F., el Mestalla, tras descender a tercera la anterior temporada ha regresado a la división de bronce haciendo un buen juego con el que ha marcado la diferencia sobre sus rivales, 13 puntos por encima del segundo clasificado. Lo cierto es que los chavales de Vicente Mir se han dejado la piel en el campo domingo tras domingo a fin de conseguir el ansiado ascenso, por lo que hay que destacar el trabajo de jugadores como Saúl, Ximo Navarro, Joel, Montoro, Isco o Paco Alcacer, sin subestimar, por supuesto, el gran trabajo de su entrenador.

Muchos de sus jugadores son merecedores de jugar en segunda división e incluso en primera, por lo que al Valencia Mestalla se le presentan ahora dos opciones probables: la primera, formar una plantilla con aspiraciones a ascender a segunda división; la segunda, mantener la categoría. Mi propuesta, si de mí dependiera, sería la primera opción, apostando fuerte por jóvenes promesas para conseguir el ascenso a la categoría de plata. Si esta opción prosperase, sería conveniente mantener a los jugadores citados anteriormente, a excepción de Isco, que muy probablemente se ceda al Getafe para ir adquiriendo minutos en primera división. En caso de realizar esta opción, lo más conveniente sería ceder a estos jugadores a equipos modestos de primera división y fuertes de segunda con la intención de que éstos vayan formándose en categorías superiores, con la finalidad de probar si tienen el nivel necesario para jugar posteriormente en el primer equipo del Valencia.

Apostar por un equipo que ascienda a la Liga Adelante sería muy beneficioso para el equipo ché, dado que en un futuro tendrían buenos jugadores garantizados, evitándose el gastar grandes cantidades de dinero en otros jugadores. Ejemplos de ellos los podemos hallar en el Villarreal o el Barça, dos equipos que cuentan con su filial en segunda división y han aprovechado a sus debutantes en primera división, como es el caso de Thiago Alcántara, Musaclio, Mario Gaspar, Wakaso, Bartra y un sinfín de jugadores más.

En definitiva, en tiempos de crisis apostar por los jugadores jóvenes es una forma práctica y efectiva de ahorrar dinero. En mi opinión, sería fructífero destinar más dinero al filial para conseguir esto en un futuro no tan lejano.